Resumen
Aprendiendo a mirar:
Recuerdo la esencia de una lectura que un día me conmovió y hoy la parafraseo libremente para ustedes, porque de alguna manera esas son palabras que marcan nuestra tarea: aprender a mirar. La historia a la que me refiero fue escrita por Eduardo Galeano y trata sobre un padre que lleva a su hijo a conocer el mar por primera vez, y luego de sortear altos médanos, después de mucho caminar, la mar estalla ante sus ojos. Y fue tanta su inmensidad, y tanto su fulgor, que el niño quedó mudo de la hermosura. Cuando por fin consiguió hablar, temblando, le pidió a su padre ¡ayúdame a mirar!
Cuando nosotros encaramos la realización de cada revista, nos enfrentamos como ese niño frente al mar, con la mirada presta al descubrimiento, al asombro y al aprendizaje.En nuestros viajes siempre hay personas que nos enseñan a mirar y comprender el lugar,su historia y tradiciones. [...] Lo nuestro se plasma en estas páginas de hojas de selva, de tierra de montaña y de agua de mar, como un descubrimiento y una ofrenda al territorio y su gente.